Cuando uno te escucha o te sigue en las diferentes redes sociales puede llamar la atención tu creencia absoluta en que la vida es como el boxeo, tan claro lo tienes?
La vida es una metáfora continua del boxeo o el boxeo es una metáfora de la vida. El mundo de las dieciséis cuerdas es como nuestra existencia, lo importante no es caerte sino levantarte y si en algo estaremos de acuerdo es que no te puedes relajar nunca, todo te puede ir muy bien pero un golpe te puede llegar en cualquier momento y mandar al traste todo. Por tanto en el ring como en nuestro destino tenemos que estar atentos hasta el último tañido de la campana.
Boxeador, escritor, presentador... y muchas cosas más, qué es lo que te enamora de todo eso en la actualidad?
Pues si te soy sincero ninguna de las tres cosas que enumeras, me encanta boxear, escribir y la televisión pero en ese camino me he encontrado gente que no me aporta mucho y estoy un poco desencantado. Un valor que tengo muy en cuenta en mi y en la gente que me rodea es la lealtad y estos mundo brilla por su ausencia. Ahora lo que verdad me incentiva es ayudar a erradicar la violencia en todas sus manifestaciones y en eso estoy ahora a tope, es lo que me seduce. Por supuesto que sigo boxeando, sigo escribiendo y sigo en la televisión pero me gustaría que mi legado fuera otro.
¿Me permites hacer un guiño a tu romanticismo? En Samaria Social, que somos de intensas emociones, nos fascina el reconocimiento expreso del amor como motor de vida.
Ahí estoy con vosotros, creo que sin amor no habría energía suficiente para pasear por estos caminos. No hay motor más potente para incentivarte, a todos los niveles, en el romántico, en la amistad, en el laboral, en los sueños, en todo.
Desde fuera, Hermano Mayor parece una experiencia apasionante, es para tanto?
Es una buena palabra para definirlo, apasionante. Es todo pasión, el primer nivel del amor, porque tienes que estar muy enamorado de tu trabajo para aguantarlo, es durísimo. Bucear en las familias todo el tiempo que estamos no es fácil, convives con dolor, sufrimiento y desesperación, y luchas con ellos para llegar a buen fin. Y así una y otra vez, lo haría una y mil veces por ayudar a estas personas pero creo que al formato habría que darle una vuelta.
¿Cuántas veces al día te acuerdas de tu barrio? ¿Qué ha significado y qué sigue significando para ti?
Lo tengo muy presente, mi gimnasio y la Fundación están por el mismo sitio que de joven navegaba en barcos piratas. En esas calles di mis primeros pasos y mis primeros besos. Me gusta sentarme a veces entre grafitis y de banda sonora la carretera de Extremadura para saber que yo no salí de allí, que sigo allí y que mi origen no marca mi destino sino mis propias decisiones.
Tuve la suerte de conocerte en tu Escuela de Boxeo y debo reconocer que en veinte minutos aprendí lo qué es el boxeo... a qué crees que se debe esa sensación?
No diremos que aprendisteis boxeo porque yo llevo veinte años y sigo siendo un aprendiz. Digamos que te diste cuenta que el boxeo no es lo que tus prejuicios y los de la mayoría de la gente os hacen creer. La ignorancia es atrevida y cuando lo ves de cerca, cuando lo conoces, cuando ves tantos valores metidos en un planeta dentro de un garaje se ve La Luz. Te das cuenta que el pugilismo no son dos tíos pegándose sin camiseta, es algo más, son familias, grupos solidarios, son tribus.
¿Cuándo nace tu "vena social" y en qué momento decides apostar por la Fundación Jero García?
Mi vena social nace desde muy temprana edad, cuando me di cuenta que yo recibí ayuda empatice al momento con la solidaridad social. Siendo adolescente un grupo subvencionado por el ayuntamiento de dedicaba a luchar contra la exclusión social en barrios conflictivos, prevenir la construcción de guetos. Tuve la fortuna de caer en sus manos y esa pequeña ayuda creó un poso que con el tiempo fermentó en la Fundación Jero García.
¿Ya has descubierto cómo funciona el movimiento asociativo en España? ¿Qué te parece la relación que se mantiene con la Administración?
La unión hace la fuerza, de eso no tengo ninguna duda. Creo firmemente que juntos llegaremos más lejos, la administración es otro cantar. Ellos van cambiando y sólo miran su ombligo, de vez en cuando hacen el paripe para la foto pero no veo a nadie que de un paso para prevenir las cosas. Ponen parches a trasatlánticos que tienen pinta de hundirse. A veces los barcos hay que sacarlos del agua y darles unos buenos puntos de soldadura.
La Fundación está muy orientada también a combatir el acoso escolar, una lacra que afecta cada más a más niños y jovenes, de dónde nace tu interés por el bullying?
Mi interés no es solo por el bullying, es por todo tipo de violencia. Desde la Fundación acometemos la prevención de todo tipo de agresividades conscientes, como la de género, la paternofilial, la del deporte y por supuesto la de entre iguales. Creo firmemente en la prevención a través de elevar la autoestima con el deporte. La actividad física nos da regalos como este y la aportación de valores tan faltos en estos momentos que transcurre la sociedad.
Y a la pregunta de dónde sale mi interés, sólo tenemos que ver los telediarios, creo que jamas ha habido tanta violencia en cualquiera de sus formas. Raro es el día que no se hable de muertes o suicidios, nunca hubo tanto bullying, tanta violencia de género y por supuesto tanta violencia paternofilial, sigamos mirando hacia otro lado y veremos hacia dónde vamos, al barranco!
Por último, ¿dónde estarás dentro de 1 mes?
Ja,ja,ja, buenísima pregunta, no sé dónde estaré, pero espero estar junto a los míos, nada más importante que la familia.
Muchas gracias, Jero por dedicarnos tu tiempo.